Recientemente, Arianna Huffington, fundadora de Huffington Post, y Sam Altman, CEO de OpenAI, han unido fuerzas para respaldar la startup Thrive AI Health, dedicada al desarrollo de tecnología de asistentes de inteligencia artificial para promover estilos de vida más saludables.

Thrive AI Health, respaldada por Thrive Global de Huffington y el OpenAI Startup Fund, planea crear un "entrenador de salud con IA" que ofrezca consejos personalizados a los usuarios sobre sueño, alimentación, ejercicio físico y gestión del estrés. DeCarlos Love, ex ejecutivo de la filial de Google Fitbit, ha sido nombrado CEO. Entre los inversores estratégicos se encuentra la Fundación Alice Walton, de Helen Walton, cofundadora de Walmart.

Atención médica con IA, médico, inteligencia artificial

Nota de la fuente: Imagen generada por IA, servicio de licencias de imágenes Midjourney

Según Huffington y Altman, Thrive AI Health utilizará plataformas de datos de salud y colaboraciones con instituciones como la Facultad de Medicina de Stanford para entrenar a su "entrenador" de salud con IA basándose en investigaciones científicas y datos médicos. Imaginan un asistente virtual, accesible a través de una aplicación para teléfonos inteligentes y productos empresariales, que aprenda el comportamiento del usuario y ofrezca consejos de salud en tiempo real.

Sin embargo, las aplicaciones de salud personalizadas impulsadas por IA han enfrentado numerosos desafíos. Proyectos como Watson Health de IBM y Babylon Health, en colaboración con el NHS, se han encontrado con obstáculos técnicos, comerciales y regulatorios. Además, la IA en la investigación de la salud puede perpetuar sesgos negativos, como lo demostró ChatGPT al mostrar prejuicios en sus respuestas a preguntas sobre salud relacionadas con la raza.

Para contrarrestar las críticas, Thrive AI Health destaca su enfoque cauteloso y afirma que busca "democratizar" la orientación sanitaria y abordar las desigualdades en la salud. La empresa ha nombrado a expertos en equidad sanitaria como asesores y se compromete a que los usuarios tengan control sobre el uso de sus datos personales.

A pesar de ello, Thrive AI Health podría enfrentarse al difícil equilibrio entre la protección de la privacidad y la adopción generalizada de la tecnología. Incidentes de filtración de datos del pasado, como el acceso no autorizado de Google DeepMind a datos de pacientes del NHS y los escándalos de UnitedHealth y 23andMe, ponen de manifiesto los riesgos de confiar datos sanitarios sensibles a terceros.