Cuerpo del texto:Con el avance de la inteligencia artificial, cada vez más empresas y gobiernos exploran la posibilidad de la "toma de decisiones automatizada". Sin embargo, las últimas encuestas a consumidores muestran que la mayoría de los estadounidenses no lo aprueban. Mucha gente se siente incómoda con la idea de que la IA decida asuntos importantes de su vida, algo que se confirma en una reciente encuesta realizada por Consumer Reports.
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La encuesta revela que más del 72% de los encuestados se sienten "incómodos" con la idea de que la IA escanee sus rostros y responda en entrevistas de trabajo, y el 45% se siente "muy incómodo".
En el sector bancario, aproximadamente dos tercios de los encuestados expresaron su descontento con el uso de la IA por parte de las instituciones financieras para determinar su elegibilidad para préstamos. La misma proporción se aplica a los propietarios que utilizan la IA para decidir sobre la elegibilidad para alquilar, con cerca del 40% de los encuestados sintiéndose "muy incómodos".
Además, la encuesta descubrió que más de la mitad de los encuestados sienten inquietud por la vigilancia mediante el reconocimiento facial con IA, y aproximadamente un tercio se siente "muy incómodo". En cuanto al diagnóstico médico y los planes de tratamiento, la mitad de los encuestados dijeron que no estaban dispuestos a que la IA participara en ellos. Estos datos reflejan la desconfianza generalizada del público hacia las decisiones de la IA.
Más importante aún, el 83% de los encuestados desean conocer el origen de los datos utilizados para entrenar los algoritmos de toma de decisiones, mientras que el 91% desea poder corregir los datos erróneos. Considerando que la IA a menudo comete errores al realizar tareas, especialmente en lo que respecta a la discriminación racial, las preocupaciones del público parecen justificadas.
A pesar del creciente sentimiento negativo del público hacia las decisiones de la IA, algunas empresas y gobiernos siguen optando por seguir adelante con el desarrollo de esta tecnología. Por ejemplo, el gobernador de California, Newsom, anunció este año una colaboración con cinco empresas de IA para probar la IA en los departamentos gubernamentales de transporte, salud pública, vivienda e impuestos. Además, el departamento de vivienda de la ciudad de Nueva York también ha probado proyectos similares, pero se enfrentó a protestas de los residentes.
En el sector privado, empresas de consultoría como McKinsey y bancos como Deutsche Bank apoyan plenamente esta nueva tecnología, aunque esto podría repetir los errores de discriminación racial del pasado en las instituciones financieras. Claramente, las protestas del público no han logrado detener a estas empresas y gobiernos.
Puntos clave:
🌐 La mayoría de los estadounidenses se oponen a la aplicación de la IA en las entrevistas de trabajo, las decisiones bancarias y las decisiones de alquiler.
🤖 El 83% de las personas desean conocer el origen de los datos utilizados en las decisiones de la IA, y el 91% desea poder corregir los datos erróneos.
🏛️ A pesar de la fuerte oposición, algunos gobiernos y empresas siguen impulsando activamente la aplicación de la tecnología de toma de decisiones de IA.
