En una subasta en Nueva York, una pintura creada por un robot humanoide se vendió por 1.08 millones de dólares (aproximadamente 566.000 libras esterlinas, 1.630.000 dólares australianos), convirtiéndose en la primera obra de arte robótica en venderse en una subasta. La pintura, titulada "A.I. God. Portrait of Alan Turing", representa al famoso matemático Alan Turing y, con una altura de 2,2 metros (7,5 pies), superó las estimaciones previas a la subasta de entre 120.000 y 180.000 dólares.

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Foto de Sotheby’s/EPA

La subasta fue organizada por la prestigiosa casa de subastas Sotheby's. La casa de subastas declaró que el resultado de esta subasta tiene un significado importante en la historia del arte moderno y contemporáneo, reflejando la creciente intersección entre la tecnología de inteligencia artificial y el mercado mundial del arte. El robot que creó la pintura se llama Ai-Da, la primera artista robótica hiperrealista del mundo, capaz de hablar. En la subasta, Ai-Da declaró: "El valor clave de mi obra radica en su capacidad para estimular el diálogo sobre las nuevas tecnologías."

Ai-Da cree que el retrato de Turing puede provocar en la audiencia una reflexión sobre el misterio que entrañan la inteligencia artificial y la informática, además de centrarse en las implicaciones éticas y sociales de estos avances tecnológicos. Turing, matemático y pionero en la informática que contribuyó decisivamente a descifrar los códigos nazis durante la Segunda Guerra Mundial, ya expresaba preocupaciones sobre el uso de la inteligencia artificial en la década de 1950.

Ai-Da fue desarrollada por el experto en arte moderno y contemporáneo Aidan Meller, y lleva el nombre de Ada Lovelace, la primera programadora informática del mundo. Meller dirigió el equipo de desarrollo de Ai-Da y colaboró con expertos en inteligencia artificial de la Universidad de Oxford y la Universidad de Birmingham. Ai-Da genera ideas a través de conversaciones con los miembros del estudio; al discutir el tema de "IA para el bien", propuso crear el retrato de Turing. Posteriormente, Ai-Da observó fotografías de Turing y creó la pintura.

Meller afirma que los "tonos suaves y los contornos faciales fragmentados" de la pintura parecen aludir a los desafíos de la gestión de la inteligencia artificial sobre los que Turing advertía. Considera que la obra de Ai-Da es "etérea e inolvidable", y plantea continuamente la cuestión de hacia dónde nos llevará la inteligencia artificial y los desafíos que el mundo enfrentará en la competencia por controlar su poder.

Puntos clave:

🌟 Una pintura creada por un robot humanoide se vendió por más de 1 millón de dólares en una subasta, superando las expectativas.

🤖 La obra "A.I. God. Portrait of Alan Turing" ha generado un amplio debate sobre la inteligencia artificial y la ética social.

🎨 Ai-Da es una artista robótica hiperrealista que genera ideas a través del diálogo, explorando la intersección entre el arte y la tecnología.