Tras cinco años de ardua restauración, la obra maestra de la arquitectura gótica del siglo XII está a punto de reabrir sus puertas al público. El devastador incendio de 2019, que conmocionó al mundo, no solo destruyó la icónica aguja de Notre Dame de París, sino que también causó graves daños a este antiguo edificio, portador de la memoria de la civilización humana. Sin embargo, gracias a la tecnología moderna, este monumento histórico vuelve a la vida con un aspecto renovado.
Este enorme proyecto, con un coste aproximado de 700 millones de euros (unos 5300 millones de yuanes), movilizó a más de 250 empresas y 2000 artesanos. Lo más destacable es el papel crucial que jugó la tecnología moderna en la restauración. La inteligencia artificial y el modelado 3D permitieron una reconstrucción más precisa y eficiente.
Uno de los puntos álgidos de la reconstrucción fue el uso de la tecnología de gemelo digital. La reconocida empresa de software de diseño Autodesk fue invitada a desarrollar un modelo digital de Notre Dame. El equipo, con el apoyo del software de Modelado de Información de Construcción (BIM) y la computación en la nube, completó un modelado preciso que incluía 12.000 objetos, más de 30.000 metros cuadrados de muros de piedra, más de 3.900 metros cuadrados de techo de plomo y 186 bóvedas de la iglesia.
Más importante aún, la empresa de diseño Art Graphique et Patrimoine (AGP) había realizado un escaneo digital detallado de la estructura interior de la iglesia antes del incendio. Estos valiosos datos sirvieron como referencia crucial para la reconstrucción. El equipo de restauración utilizó la tecnología de escaneo láser, recopilando cientos de miles de puntos de datos por segundo con una precisión de 1-2 milímetros, lo que garantizó la precisión del trabajo de reconstrucción.
Toda la obra de restauración representa una perfecta fusión entre la artesanía tradicional y la tecnología moderna. El equipo de restauración utilizó 2400 robles para reconstruir el techo y restauró cuidadosamente más de 2000 esculturas y ornamentos. Gracias al modelado 3D, los ingenieros pudieron evaluar la estabilidad de la estructura del edificio y simular diferentes esquemas de iluminación, optimizando la disposición de los equipos de construcción.
El 8 de noviembre, el sonido de las campanas del campanario norte de Notre Dame resonó de nuevo en el cielo parisino, simbolizando el renacimiento de este antiguo edificio. Hoy en día, la nave central de la iglesia ha sido completamente renovada, con los bancos y el mobiliario litúrgico dispuestos ordenadamente, y los emblemáticos rosetones han recuperado su antiguo esplendor.
Notre Dame de París abrirá oficialmente sus puertas al público del 7 al 8 de diciembre. Este edificio, que combina artesanía antigua y tecnología de vanguardia, mostrará una nueva imagen y continuará siendo testigo de la transmisión y el desarrollo de la civilización humana. Esta obra de restauración no solo demuestra el importante valor de la tecnología moderna en la protección del patrimonio cultural, sino que también proporciona una valiosa experiencia para la restauración de otros edificios antiguos en todo el mundo.