Recientemente, Google eliminó silenciosamente de su sitio web oficial un compromiso de no desarrollar inteligencia artificial (IA) para armas o vigilancia. El cambio, reportado inicialmente por Bloomberg, ha generado un amplio debate y atención.

Google actualizó recientemente su página de principios de IA pública, eliminando la sección titulada "Aplicaciones que no perseguiremos", que aún estaba visible la semana pasada.

Robot de exploración Inteligencia Artificial 2025

Nota de la fuente: Imagen generada por IA, proveedor de servicios de licencias de imágenes Midjourney

Los principios de IA actualizados de Google enfatizan el compromiso de la compañía con la "mitigación de resultados inesperados o dañinos, la evitación de sesgos injustos" y la garantía de que su desarrollo sea coherente con "los principios universalmente aceptados del derecho internacional y los derechos humanos". Esto sugiere un posible cambio en la postura de Google sobre las aplicaciones de IA.

En los últimos años, los contratos de servicios en la nube de Google con los militares estadounidenses e israelíes provocaron protestas internas entre los empleados. A pesar de las reiteradas afirmaciones de Google de que su tecnología de IA no se utiliza para dañar a los humanos, el responsable de IA del Departamento de Defensa de EE. UU. declaró recientemente en una entrevista con Tech Crunch que algunos modelos de IA de la compañía en realidad aceleraron el proceso de toma de decisiones militares de EE. UU. Esta declaración genera dudas sobre las futuras aplicaciones de la IA de Google.

Este cambio de Google ha suscitado una reflexión sobre el papel de las empresas tecnológicas en el ámbito militar y de vigilancia. En un contexto de creciente preocupación mundial por los problemas éticos de la tecnología de IA, esta nueva medida de Google es especialmente llamativa. El público y los empleados siguen de cerca cómo la empresa mantiene una imagen responsable en este delicado ámbito y cómo equilibra los intereses comerciales con las responsabilidades éticas.

Con el continuo avance y aplicación de la tecnología de IA, el cambio de postura de Google podría tener un profundo impacto en toda la industria, y nos invita a reconsiderar la ética y la responsabilidad tecnológica del futuro.