La industria de pantallas de Japón está experimentando una transformación significativa. Sharp, otrora gigante en la producción de grandes paneles LCD para televisores, ha cesado completamente la producción en su filial Sakai Display Product Co., Ltd. (SDP) en 2024, marcando el fin de la era de la fabricación de paneles LCD de gran tamaño para televisión en Japón.
Sin embargo, la antigua fábrica, antes silenciosa, está a punto de cobrar una nueva vida. Según el Nikkei, SoftBank Group firmó oficialmente un acuerdo este viernes para adquirir la antigua fábrica de Sharp en Sakai, Osaka, y parte de sus terrenos por aproximadamente 100.000 millones de yenes (aproximadamente 4.877 millones de yuanes chinos). SoftBank planea convertirla en un centro de datos a gran escala y colaborar estrechamente con OpenAI, líder en innovación en inteligencia artificial, para impulsar la comercialización de la tecnología de agentes de IA.
De hecho, SoftBank ya había anunciado su intención de adquisición en diciembre pasado, con el mismo precio de 100.000 millones de yenes para una parte de la tierra y los edificios de la fábrica de paneles LCD de Sharp Sakai. La transacción abarca aproximadamente 450.000 metros cuadrados de terreno y unos 840.000 metros cuadrados de edificios. Sobre esta extensa superficie, SoftBank planea construir su enorme centro de datos de IA.
Según el plan estratégico de SoftBank, este centro de datos se centrará en el entrenamiento personalizado de modelos de IA avanzados utilizando datos proporcionados por clientes empresariales, ofreciendo así servicios de agentes de IA exclusivos para estas empresas. Se espera que el proyecto entre en funcionamiento en 2026, con una capacidad de energía de 150 megavatios, convirtiéndose posiblemente en una de las infraestructuras de computación más grandes de Japón.
Cabe destacar que la superficie vendida por Sharp a SoftBank representa aproximadamente el 60% de su fábrica de Sakai. Además de la importante colaboración con SoftBank, Sharp también firmó un memorando de entendimiento con el operador de telecomunicaciones japonés KDDI. Según este memorando, KDDI también comprará parte de los terrenos de la fábrica de Sharp en Sakai para construir su propio centro de datos de IA, con el objetivo de iniciar la construcción en el presente ejercicio fiscal y ponerlo en pleno funcionamiento en un año. Esto significa que la fábrica, antes dedicada a la producción de pantallas, se transformará en el motor de computación que sustentará la industria de la inteligencia artificial en Japón.