El gobierno japonés está elaborando un borrador de directrices para el uso de la inteligencia artificial (IA) en las empresas. El borrador establece claramente que los desarrolladores de algoritmos, los implementadores de servicios y las empresas que utilizan la IA compartirán la responsabilidad.
Las directrices proponen que todas las partes involucradas en el uso de la IA deben cumplir con la ley, prohibiendo el uso de la IA para actividades ilegales o delictivas, o para infringir los derechos de terceros.
Asimismo, las directrices exigen que la gerencia de las empresas preste atención a los riesgos asociados con el uso de la IA y establezca políticas y normas internas pertinentes.
Japón espera impulsar la innovación en tecnología de IA y mejorar la alfabetización en IA de toda la sociedad a través de estas directrices.
