El artículo debate si la investigación actual sobre alineación de la inteligencia artificial (IA) puede prevenir eficazmente los futuros daños catastróficos. El autor argumenta que estas investigaciones se centran principalmente en mejorar el rendimiento del producto y tienen dificultades para abordar los problemas de seguridad más profundos. Prevenir una catástrofe requiere una participación más amplia en el debate sobre la ética y la gobernanza de la IA. La opinión pública es crucial, pero no se puede depender únicamente de aquellos que se benefician del despliegue de la IA.