Con la ola de IA generativa desatada por ChatGPT, los problemas de rentabilidad del sector han salido a la luz. Los productos de gigantes como OpenAI y Microsoft tienen altos costos operativos, incluso con pérdidas mensuales de decenas de dólares, y están buscando desesperadamente vías para obtener beneficios. La nueva suscripción mensual de Office 365 de Microsoft, que integra la tecnología GPT, cuesta 30 dólares, lo que ha provocado críticas por su elevado precio; sin embargo, Microsoft argumenta que ha invertido una gran cantidad de dinero en sus productos de IA y niega que el precio sea excesivo. Se espera que la industria de la IA generativa enfrente su primera ronda de eliminación, y la rentabilidad se convertirá en la clave para la supervivencia. Las empresas están intentando reducir los costos de uso mediante el desarrollo de sus propios chips, la implementación de suscripciones de pago, etc. Ante la presión de las pérdidas, los productos de IA generativa necesitan más tiempo para establecer un modelo de negocio sostenible.