Recientemente, Bill Gates expresó en una entrevista sus expectativas moderadas sobre GPT-5. Considera que el progreso de GPT-2 a GPT-4 ha sido asombroso, y que es poco probable que GPT-5 presente mejoras radicales. Sin embargo, mantiene una visión optimista sobre el potencial de la tecnología de IA actual en áreas como el desarrollo de fármacos. Como inversor de OpenAI, Microsoft también sigue de cerca el desarrollo de su tecnología. En general, Gates se muestra optimista sobre el futuro de la inteligencia artificial, y cree que en los próximos años se podrán lograr avances en términos de coste y fiabilidad, y que en 10 años se conseguirá una IA explicable.