Se firmó en el Parque Bletchley-Turing un protocolo global de ciberseguridad para la IA, en el que Estados Unidos, el Reino Unido, China y la Unión Europea, entre otros 28 países, suscribieron la "Declaración de Bletchley". Este acuerdo tiene como objetivo gestionar los riesgos de ciberseguridad asociados a las nuevas herramientas de inteligencia artificial.
El protocolo hace hincapié en la ciberseguridad y la protección de la privacidad, proporcionando una base sólida para la innovación responsable de la IA a nivel mundial. Esta firma refleja el compromiso de los líderes mundiales con el desarrollo de una IA segura, garantizando un desarrollo responsable de esta tecnología.