Una nueva investigación del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) ha descubierto que el alto coste de la tecnología de inteligencia artificial (IA) podría llevar a los empleadores a preferir mantener a sus empleados actuales. Incluso con los avances tecnológicos que reducirán el coste de implementar la IA, la mayoría de las empresas tardarán décadas en que el uso de la visión artificial sea económicamente viable.

El estudio del MIT ofrece cierto alivio a las preocupaciones sobre el desplazamiento de empleos por la IA.