El gobierno británico ha decidido invertir cerca de 90 millones de libras esterlinas en inteligencia artificial, creando 9 nuevos centros de investigación que apoyarán la especialización en IA en áreas como la atención médica, la química y las matemáticas. Esta iniciativa también incluye una inversión de 2 millones de libras esterlinas para definir una inteligencia artificial responsable en educación, fuerzas del orden y las industrias creativas, con el objetivo de mejorar las habilidades de los organismos reguladores sectoriales para abordar eficazmente los desafíos de la gobernanza de la IA.