La startup Grit ha desarrollado un asistente de IA para desarrolladores, también llamado Grit, que simplifica el proceso de mantenimiento de software mediante el análisis, seguimiento automático y la sugerencia de actualizaciones y mejoras. Este asistente ha recibido una financiación de 7 millones de dólares, y su fundador, Morgante Pell, espera aliviar la carga de los desarrolladores mediante la automatización del mantenimiento.

La versión beta abierta de Grit ya está disponible y planea cubrir todos los principales lenguajes de programación. La herramienta es adecuada para la modernización de bases de código antiguas y puede ahorrar una cantidad significativa de tiempo a empresas de tecnología establecidas y fintech.