La inteligencia artificial está cambiando gradualmente el campo de la predicción meteorológica, proporcionando a los meteorólogos herramientas poderosas para mejorar la precisión de sus pronósticos. Al aprovechar modelos meteorológicos avanzados para procesar grandes cantidades de datos, la inteligencia artificial ha logrado avances significativos. La IA simula y analiza eventos meteorológicos pasados, identificando patrones climáticos recurrentes, lo que mejora la capacidad de predecir las condiciones meteorológicas futuras.

A pesar de las muchas ventajas que ofrece la aplicación de la inteligencia artificial en meteorología, también ha planteado interrogantes sobre el papel del conocimiento humano y el toque personal en la predicción meteorológica.