La startup estadounidense Inflection AI ha lanzado recientemente su modelo de lenguaje de última generación, Inflection-2, el cual ha demostrado un rendimiento excepcional en diversas pruebas de referencia, rivalizando con el GPT-4 de OpenAI y superando a productos similares de Google y Meta. Se planea integrar Inflection-2 en Pi, el asistente personal de la compañía lanzado en mayo. Inflection AI, en colaboración con Microsoft, Nvidia y CoreWeave, entrenó Inflection-2 utilizando 5000 GPU, alcanzando una capacidad de cálculo de 1025. La compañía confía en aumentar el tamaño del modelo en 100 veces en el próximo año.